Cómo preparar la confesión de los pecados

la mejor definición que conozco de la confesión, sacramento de reconciliacion con Dios, es esta:

«La confesión es el momento en que el padre de la parábola del hijo pródigo, abraza a su hijo, se le tira al cuello y le llena de besos, mientras el hijo le suelta su discurso preparado de:

«Padre, he pecado contra el Cielo y contra Ti, ya no soy digno de llamarme hijo tuyo»

Hay que hacer examen de conciencia, arrepentirse de los pecados cometidos, decir los pecados al confesor y cumplir la penitencia

Recuerda que esto va de dejarse mirar y perdonar por Alguien que nos ama y que quiere que digamos a un humano, el sacerdote, los pecados para que estemos seguros de que El, Dios, nos perdona.

¿Sabías que Dios, Nuestro Señor, está fuera del tiempo, que es algo creado?

¿Y?

Pues que en cuanto te perdona los pecados los olvida. Ya no existen. Solo quedan en nuestra mente (y en nuestro cuerpo) como una cicatriz que hay que ir borrando con la ayuda de Dios, que nos quiere tanto que solo espera un gesto para abrazarnos.

Cómo lo que mas cuesta es el Examen de conciencia copio aqui una guia:

Amarás a Dios sobre todas las cosas…

– ¿Creo todo lo que Dios ha revelado y nos enseña la Iglesia Católica? ¿He dudado o negado las verdades de la fe católica? ¿Doy testimonio de mi fe entre mis amigos?

– ¿Hago con desgana las cosas que se refieren a Dios? ¿Rezo con frecuencia y atención? ¿Agradezco a Dios tantas cosas buenas que me ha dado?

– ¿Me he acercado indignamente a recibir algún sacramento? ¿He callado por vergüenza algún pecado mortal en confesiones anteriores?

– ¿He dicho palabras irreverentes? ¿He jurado sin verdad o sin necesidad, sin prudencia o por cosas de poca importancia?

– ¿He faltado a Misa, o la he vivido mal, los domingos o festivos, por mi culpa y sin una razón grave? ¿Vivo los días de fiesta y fines de semana como cristiano?

… y al prójimo como a ti mismo.

– ¿Manifiesto respeto y cariño a mis padres? ¿Les obedezco con prontitud y alegría? ¿Colaboro en las tareas de la casa? ¿Doy buen ejemplo a mis hermanos y les ayudo en sus necesidades? ¿Riño con ellos o los insulto?

– ¿Respeto a los profesores y autoridades?

– ¿Respeto mi vida y la de los demás? ¿He agredido a personas o participado en peleas? ¿Difundo el cuidado de la vida, también de la de los no nacidos?

– ¿He dañado o puesto en peligro mi vida o mi salud: incumpliendo las normas de tráfico, o con desorden en el horario de descanso nocturno?

– ¿He bebido o comido en exceso, me he emborrachado o tomado drogas?

– ¿Deseo el bien a los demás? ¿Los he perjudicado con engaños, trampas o amenazas? ¿Tengo envidia, y me molesto cuando a otros les salen las cosas bien o me alegro cuando les salen mal?

– ¿Me tomo en serio la amistad, o por el contrario me conformo con un trato superficial y frívolo? ¿Soy leal y sincero con mis amigos? ¿Rezo por ellos y perdono sus defectos?

– ¿Vivo la castidad? ¿He realizado actos impuros? ¿Solo o con otras personas? ¿He consentido pensamientos, deseos o sensaciones impuras?

– ¿He visto vídeos, programas, revistas o imágenes indecentes? ¿He asistido a fiestas, diversiones o espectáculos que fácilmente me incitaban a pecar? ¿He incitado a otros a hacer el mal?

– ¿He tomado cosas que no son mías? ¿Las he devuelto?

– ¿Soy generoso, y pongo mis cosas al servicio de los demás, o estoy excesivamente apegado a ellas? ¿Me quejo cuando no tengo lo que quiero o me falta alguna comodidad? ¿He malgastado el dinero por capricho, vanidad o envidia?

– ¿Colaboro de algún modo con las necesidades de la Iglesia y de la sociedad? ¿Pienso en tantas personas que padecen hambre, enfermedad o soledad y procuro ayudarles en la medida de mis posibilidades?

– ¿Estudio con orden e intensidad y cumplo con mis deberes de estudiante? ¿Procuro acabar bien el trabajo? ¿He estorbado el estudio de los demás, interrumpiéndoles, dificultando que cumplan su horario o dando mal ejemplo?

– ¿He dicho mentiras? ¿Pienso mal del prójimo y juzgo sin fundamento o sin necesidad? ¿Hablo mal de los demás: inventando falsedades sobre su comportamiento, revelando sin necesidad sus defectos graves o haciendo eco a chismes? ¿He reparado el daño que he causado con esas conversaciones?

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