- La Muerte: historia de Santa Teresa de Ávila, quien decía que «la muerte es tan solo el inicio de la vida verdadera». Para ella, la muerte no era el fin, sino una puerta hacia la unión con Dios. Puedes ver la muerte como un paso hacia algo más grande, como en The Shack o Heaven is for Real, que invitan a pensar en la trascendencia.
- El Purgatorio: Explicar el purgatorio como un lugar de purificación puede ser más claro con la analogía de un fuego que limpia y purifica el oro. San Juan Bosco tuvo visiones sobre el purgatorio, donde sus estudiantes se purificaban para poder entrar al cielo. Hay películas que muestran la transformación y el arrepentimiento, como A Christmas Carol de Charles Dickens, donde el protagonista se enfrenta a sus errores antes de encontrar la paz.
- El Cielo: el destino final donde podemos vivir en la plenitud del amor de Dios. Para los santos, el cielo es como volver a casa después de un largo viaje. San Felipe Neri decía: «Quiero ir al cielo; cuanto antes, mejor». Escenas como las del final de C.S. Lewis’s The Chronicles of Narnia representan este sentido de plenitud y alegría que esperan a quienes aman a Dios.
- La Resurrección: los apóstoles y los primeros cristianos vivieron con esperanza gracias a la resurrección de Jesús, sabiendo que la muerte ya no tenía la última palabra. Jesús resucitado es la prueba de que hay vida después de la muerte. Películas como Risen o escenas de la serie The Chosen muestran la esperanza que la resurrección da a todos los creyentes. En The Chosen, una escena poderosa que muestra la esperanza en la resurrección y la vida eterna ocurre en el episodio 3 de la temporada 2. Aquí, Jesús consuela a María Magdalena, quien atraviesa una lucha interna y cae en un momento de debilidad. Ella se siente llena de vergüenza y no cree ser digna de perdón o de una nueva oportunidad. Jesús la recibe con compasión y le recuerda que el amor de Dios es incondicional, que la perdona y le da siempre una oportunidad de volver a Él.
Noviembre, mes de los difuntos: está dedicado a rezar por los que han muerto, porque creemos en la comunión de los santos y en que nuestras oraciones y sacrificios pueden ayudar a las almas que están en purgatorio. Santa Faustina Kowalska tuvo visiones donde las almas en el purgatorio pedían oraciones para alcanzar la paz. Puedes entenderlo como una muestra de amor y solidaridad, ya que incluso después de la muerte, podemos ayudar a quienes aún necesitan nuestra oración para alcanzar la plenitud en Dios.